Reconstrucción en marcha

Cada día que pasa se siente más lejano el momento en que nuestro país fue sacudido por los sismos que nos dejaron en una situación compleja tanto en lo económico como en lo social. Estamos regresando a la normalidad de manera rápida y estamos en un proceso de reconstrucción que se ha llevado a cabo de manera acelerada porque entendemos, que la pérdida de las personas exige esta velocidad. El deseo de todos los actores sociales involucrados en este proceso es realizar la labor en el menor tiempo posible y por su parte, el Gobierno de la República ha apresurado muchos procesos para dar soluciones rápidas a quienes perdieron parte de su vida ante estos fenómenos naturales. Por esto, una parte importante de la labor que se ha impulsado es comunicar oportunamente a la sociedad de las acciones que se están realizando para ofrecerles seguridad y certeza de que el tema es prioridad de todos. En este sentido y siguiendo en esta línea de dar a conocer los avances que se van generando puedo decir que, a dos meses de los sismos los resultados son positivos en el tema de la reconstrucción. Esta semana el presidente Peña visitó la comunidad de La Nopalera en Yautepec, Morelos, e inicio la distribución de tarjetas bancarias con apoyos económicos para la reconstrucción de viviendas en esta entidad; con esto son Morelos se suma a Chiapas y Oaxaca en la dispersión de apoyos. Sabemos que  a la fecha, se han entregado en Oaxaca prácticamente el 90 por ciento de las tarjetas a personas que resultaron damnificadas, y en el caso de Chiapas se lleva casi a un 50 por ciento. Es importante resaltar aquí que no todos los lugares presentan las mismas condiciones geográficas y de concentración de viviendas por lo que, la tarea se ha llevado a ritmos distintos en razón de las condiciones y características de cada lugar en donde se tiene que reconstruir. Es necesario recordar que el Gobierno de la República está entregando tarjetas con dos tipos de apoyo: para quienes tuvieron afectaciones parciales en sus viviendas y para quienes registraron afectaciones totales. El uso de los recursos para tener una vivienda nuevamente no es algo que tengamos asegurado a pesar de lo que todos esperaríamos por lo que, en este proceso de levantar nuevamente las viviendas se ha creado una figura que sea garante de que los recursos se utilicen  de manera correcta, hablamos de las mujeres vigilantes. Hay una convocatoria abierta a las mujeres en las distintas entidades afectadas para que verifiquen, inscritas en el programa de Mujeres Vigilantes, que los recursos que el Gobierno entrega mediante las tarjetas bancarias realmente se empleen o se dediquen a la reconstrucción de sus viviendas. Actualmente ya hay más de mil Mujeres Vigilantes inscritas en las distintas entidades afectadas por los sismos, quienes de manera voluntaria y solidaria vigilan el buen empleo del recurso económico que se está entregando. En todas las entidades donde hubo afectaciones, incluyendo Chiapas y Oaxaca, se han removido más de dos millones de metros cúbicos de escombros, tanto de las casas que lamentablemente resultaron derruidas, como de las casas que se han tenido que demoler. Estos números implican 18 mil viviendas demolidas en las distintas entidades afectadas. Casi 16 mil escuelas en el país también resultaron dañadas por los sismos y la reconstrucción de las escuelas que tuvieron daños parciales ya se ha iniciado en algunas entidades de hecho, a partir del próximo mes de diciembre empezará la reconstrucción de las escuelas que tuvieron afectaciones totales; esto nos va a permitir tener nuevamente reconstruidas las 16 mil escuelas que resultaron afectadas. Los sismos de septiembre pasado dañaron, también,  mil 821 edificaciones que forman parte del patrimonio cultural del país y ya se ha puesto en marcha un plan para la reconstrucción de este patrimonio. La buena noticia es que ese patrimonio cultural que quedó dañado no va a tener que demolerse, se ha hecho un esfuerzo mayor para que realmente se pueda salvar ese patrimonio cultural. Es claro que el camino seguido ha dado frutos para atender a las personas damnificadas en estos sismos, sin embargo, nunca dejaremos de mencionarlo;  lamentablemente lo que es irreparable, fue el deceso de 471 personas a consecuencia de estos sismos y seguimos expresando, invariablemente, nuestra solidaridad para con las familias de quienes perdieron un ser querido.