martes, 4 de octubre de 2016

No Puedo Perdonar La Separación De Mis Padres. Por Mayra Cuanalo Gómez



En la actualidad, casi la mitad de las familias tienen un solo padre a nivel mundial.  Una de cada tres parejas que se casan terminan en divorcio y es por su puesto una crisis que afecta a los hijos.

Cuando un padre se separa, los hijos viven esta situación de distintas formas, hay quien lo recuerda como un momento muy difícil, como un momento mejor al de un ambiente de peleas… En fin… No podemos generalizar lo que se siente como hijo porque cada quien tiene una percepción diferente.

Cuando los padres se separan, llegan sensaciones distintas a los hijos como:


  • Desilusión por una expectativa no cumplida. Todos esperamos que nuestros padres sigan unidos. Desde el niño hasta el adulto, siempre esperamos la idea de ver a nuestros padres juntos. Por lo que viene un periodo de desilusión cuando los papás se separan. 
  • Culpa. Los hijos comúnmente tienen la idea de haber podido evitar la separación de sus padres y esta idea por supuesto que es falsa. En una separación siempre existe el 50% de responsabilidad de un miembro y el 50% de responsabilidad del otro padre. Pero no más de uno que del otro, aunque uno de ellos haya sido el de la decisión inicial, esto no implica que este miembro tenga más responsabilidad. No es en ningún momento culpa de un hijo. 


Un gran error en la separación de los padres es involucrar a los hijos en la misma, y es que escucho mucho en el consultorio cuando los “hijos” se vuelven los mensajeros de un padre al otro. “Pídele dinero a tu papá”, “Pregúntale a tu papá si ya tiene novia” y como estas frases les podría decir miles… Esto lo que provoca es que los hijos se sientan involucrados en el proceso.

Estar de acuerdo o no de la separación o la unión de los padres no es asunto de un hijo, es asunto de los padres y es importante tener claro que se necesita de la voluntad de ambos.

Es fundamental perdonar la separación cuando sucede, los hijos deben perdonar si fueron lastimados en el proceso y entender que los padres tal vez pudieron manejar mejor la relación pero en ese momento no tuvieron la capacidad de hacerlo y no fue a propósito que lastimaran a los hijos.

Lo mejor que puede hacer un hijo es reconciliarse con ambos padres y cuando les digo esto a hijos que llevan meses o años sin ver a alguno de los dos padres me responden “¡No lo voy a buscar, me hizo mucho daño!”. Si puedes buscar el acercamiento con tu padre que tiene mucho que no ves está genial, pero lo importante no es buscarlo o no buscarlo, sino estar en paz en tu corazón respecto a ambos padres. Ya que un hijo que vive con resentimiento de alguno de sus dos padres no se siente completo emocionalmente.

Una situación que veo frecuentemente en terapia es la de hijos que siguen en su casa de manera inconsciente porque escuchan que sus padres les dicen “Sigo con tu padre/madre solo por ustedes, el día que no estén nuestros hijos aquí, nos separaremos”.  El mensaje detrás de esto es “No te vayas y nos dejes”. ¡Cuánta responsabilidad para un hijo! ¿No crees? Si este es tu caso te recomiendo no detener tu vida por temor a que la separación suceda, pues si ellos permanecen o no permanecen juntos, será responsabilidad de ellos.  ¡No cargues con su relación! Tomar un rol que no te corresponde puede traerte muchos problemas que tampoco te corresponden.

Un hijo de padres separados no deja de ser hijo del padre ni hijo de la madre, es importante entender que el rompimiento de la relación entre ellos, no corta tu relación hijo-padre o hijo-madre. Pues ellos siempre serán tus padres.

Vale la pena que tu corazón esté tranquilo y que el sentimiento hacia tus padres sea de amor.



Terapia Individual y Terapia de Pareja
Consulta Previa Cita: 044 2221 83 83 07
Facebook: Psicóloga Mayra Cuanalo Gómez

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martes, 4 de octubre de 2016

No Puedo Perdonar La Separación De Mis Padres. Por Mayra Cuanalo Gómez



En la actualidad, casi la mitad de las familias tienen un solo padre a nivel mundial.  Una de cada tres parejas que se casan terminan en divorcio y es por su puesto una crisis que afecta a los hijos.

Cuando un padre se separa, los hijos viven esta situación de distintas formas, hay quien lo recuerda como un momento muy difícil, como un momento mejor al de un ambiente de peleas… En fin… No podemos generalizar lo que se siente como hijo porque cada quien tiene una percepción diferente.

Cuando los padres se separan, llegan sensaciones distintas a los hijos como:


  • Desilusión por una expectativa no cumplida. Todos esperamos que nuestros padres sigan unidos. Desde el niño hasta el adulto, siempre esperamos la idea de ver a nuestros padres juntos. Por lo que viene un periodo de desilusión cuando los papás se separan. 
  • Culpa. Los hijos comúnmente tienen la idea de haber podido evitar la separación de sus padres y esta idea por supuesto que es falsa. En una separación siempre existe el 50% de responsabilidad de un miembro y el 50% de responsabilidad del otro padre. Pero no más de uno que del otro, aunque uno de ellos haya sido el de la decisión inicial, esto no implica que este miembro tenga más responsabilidad. No es en ningún momento culpa de un hijo. 


Un gran error en la separación de los padres es involucrar a los hijos en la misma, y es que escucho mucho en el consultorio cuando los “hijos” se vuelven los mensajeros de un padre al otro. “Pídele dinero a tu papá”, “Pregúntale a tu papá si ya tiene novia” y como estas frases les podría decir miles… Esto lo que provoca es que los hijos se sientan involucrados en el proceso.

Estar de acuerdo o no de la separación o la unión de los padres no es asunto de un hijo, es asunto de los padres y es importante tener claro que se necesita de la voluntad de ambos.

Es fundamental perdonar la separación cuando sucede, los hijos deben perdonar si fueron lastimados en el proceso y entender que los padres tal vez pudieron manejar mejor la relación pero en ese momento no tuvieron la capacidad de hacerlo y no fue a propósito que lastimaran a los hijos.

Lo mejor que puede hacer un hijo es reconciliarse con ambos padres y cuando les digo esto a hijos que llevan meses o años sin ver a alguno de los dos padres me responden “¡No lo voy a buscar, me hizo mucho daño!”. Si puedes buscar el acercamiento con tu padre que tiene mucho que no ves está genial, pero lo importante no es buscarlo o no buscarlo, sino estar en paz en tu corazón respecto a ambos padres. Ya que un hijo que vive con resentimiento de alguno de sus dos padres no se siente completo emocionalmente.

Una situación que veo frecuentemente en terapia es la de hijos que siguen en su casa de manera inconsciente porque escuchan que sus padres les dicen “Sigo con tu padre/madre solo por ustedes, el día que no estén nuestros hijos aquí, nos separaremos”.  El mensaje detrás de esto es “No te vayas y nos dejes”. ¡Cuánta responsabilidad para un hijo! ¿No crees? Si este es tu caso te recomiendo no detener tu vida por temor a que la separación suceda, pues si ellos permanecen o no permanecen juntos, será responsabilidad de ellos.  ¡No cargues con su relación! Tomar un rol que no te corresponde puede traerte muchos problemas que tampoco te corresponden.

Un hijo de padres separados no deja de ser hijo del padre ni hijo de la madre, es importante entender que el rompimiento de la relación entre ellos, no corta tu relación hijo-padre o hijo-madre. Pues ellos siempre serán tus padres.

Vale la pena que tu corazón esté tranquilo y que el sentimiento hacia tus padres sea de amor.



Terapia Individual y Terapia de Pareja
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